Inteligencia de amenazas y otras yerbas
La inteligencia de amenazas (CTI), consiste en recopilar información detallada sobre ciberamenazas, que ayuda a prevenir y combatir ataques dirigidos a una organización. Se reduce al refinamiento de datos, con conocimientos detallados sobre las amenazas, que permiten a los equipos de seguridad ser proactivos y tomar medidas efectivas basadas en datos para impedir ciberataques.
En este sentido, prevenir y combatir ataques dirigidos a una organización. Se recopilan, procesan y analizan datos con conocimientos detallados sobre las amenazas, lo que permite a los equipos de seguridad ser proactivos y tomar medidas efectivas basadas en datos para impedir ciberataques. La inteligencia de amenazas también ayuda a detectar y responder mejor a los ataques en curso, filtrar falsos positivos e interceptar atacantes activos pero ocultos.
Esta inteligencia también ayuda a detectar y responder mejor a los ataques en curso, filtrar falsos positivos e interceptar atacantes activos, pero ocultos. Se basa en un proceso analítico y lógico para evaluar los datos en su contexto, y puede incluir indicadores, mecanismos, implicaciones y consejos orientados a la acción en relación con las amenazas y ataques.
Se basa en un proceso analítico y lógico para evaluar los datos en su contexto, y puede incluir indicadores, mecanismos, implicaciones y consejos orientados a la acción en relación con las amenazas y ataques. La inteligencia de amenazas se divide en cuatro categorías:
La información para la inteligencia de amenazas se recopila a través de diversas fuentes, incluyendo fuentes legibles por máquina, eventos de seguridad, análisis de malware, actividades de piratería, entre otros. La inteligencia resultante es procesada y analizada para evaluar los datos en su contexto, y puede incluir indicadores, mecanismos, implicaciones y consejos orientados a la acción en relación con las amenazas y ataques. La idea es identificar indicadores de compromiso (IoC), es decir; son datos que surgen de la actividad en un sistema y que caracterizan o describen una amenaza.
Estos indicadores permiten detectar intrusos y determinar si se ha producido un fallo de seguridad. Pueden incluir nombres de archivos, hashes, direcciones IP, entre otros. Las organizaciones utilizan los IoC para identificar y prevenir posibles amenazas a su ciberseguridad, y son fundamentales para el análisis de seguridad y la detección de actividades potencialmente maliciosas. Las herramientas de inteligencia de amenazas, tanto comerciales como de código abierto, suelen utilizar IoC para identificar y prevenir ciberataques.
Los tipos de información que se pueden recopilar incluyen:
· Datos de eventos de seguridad: Información sobre eventos y actividades en la red que pueden indicar posibles amenazas.
· Análisis de malware: Detalles sobre el malware, su comportamiento y sus posibles orígenes.
· Actividades de hacking: Información sobre intentos de acceso no autorizado, brechas de seguridad y actividades de ciberdelincuentes.
La inteligencia de amenazas, entonces; identifica amenazas a la seguridad de una organización de varias maneras, entre ellas:
· Prevención y combate de ciberamenazas: Proporciona información detallada sobre amenazas, lo que permite a los equipos de seguridad ser proactivos y tomar medidas efectivas basadas en datos para prevenir ciberataques.
· Detección y respuesta a ataques en curso: Ayuda a detectar y responder mejor a los ataques en curso, filtrar falsos positivos e interceptar atacantes activos pero ocultos.
· Análisis de eventos de seguridad, malware y actividades de piratería: La información se recopila de fuentes como eventos de seguridad, análisis de malware y actividades de piratería para identificar posibles amenazas.
· Integración en el Centro de Operaciones de Seguridad (SOC): La inteligencia de amenazas se integra en el SOC para analizar, interpretar y mitigar las amenazas y ataques a la ciberseguridad en continua evolución.
Existen varias plataformas comerciales de inteligencia de amenazas. Algunas de estas plataformas son:
· AutoFocus: Una plataforma de inteligencia de amenazas de Palo Alto Networks que utiliza análisis de comportamiento para identificar y prevenir amenazas.
· Criminal IP: Una plataforma de inteligencia de amenazas que se enfoca en la identificación de direcciones IP utilizadas por ciberdelincuentes.
· ManageEngine Registro360: Una plataforma de inteligencia de amenazas que se enfoca en la identificación de amenazas a través del análisis de registros de eventos.
· AlienVault USM: Una plataforma de inteligencia de amenazas que utiliza análisis de comportamiento y correlación de eventos para identificar y prevenir amenazas.
· Qualys Protección: Una plataforma de inteligencia de amenazas que se enfoca en la identificación de vulnerabilidades y amenazas a través del análisis de la infraestructura de TI.
Existen también varias plataformas de inteligencia de amenazas de código abierto. Algunas de estas plataformas son:
· MISP (Malware Information Sharing Platform): Una plataforma de inteligencia de amenazas de código abierto que se enfoca en la compartición de información sobre amenazas.
· Yeti: Una plataforma de inteligencia de amenazas de código abierto que se enfoca en la agregación y análisis de datos de amenazas.
· OpenCTI: Una plataforma de inteligencia de amenazas de código abierto que se enfoca en la gestión de información sobre amenazas.
· CRITs: Una herramienta open source de inteligencia de amenazas que se enfoca en la recopilación y análisis de información sobre amenazas.
· CIF: Una herramienta open source de inteligencia de amenazas que se enfoca en la agregación y análisis de datos de amenazas.
· MANTIS: Una herramienta open source de inteligencia de amenazas que se enfoca en la recopilación y análisis de información sobre amenazas.
· GOSINT: Una herramienta open source de inteligencia de amenazas que se enfoca en la recopilación y análisis de información sobre amenazas.
· MineMeld: Una herramienta open source de inteligencia de amenazas que se enfoca en la agregación y análisis de datos de amenazas.
Estas herramientas open source de inteligencia de amenazas pueden ayudar a las organizaciones a identificar y prevenir posibles amenazas a su seguridad cibernética mediante la recopilación, procesamiento y análisis de información relevante.
La adopción de una estrategia de inteligencia de amenazas es crucial para ayudar a las organizaciones a comprender y anticipar amenazas potenciales que puedan afectar su seguridad.
La inteligencia de amenazas se materializa en una plataforma SOC para analizar, interpretar y mitigar las amenazas y ataques a la ciberseguridad en continua evolución.