Nube distribuida o multinube…
El debate sobre la multiplicidad de nubes continúa. Casi cada organización está considerando y evaluando una estrategia de varias nubes para el año 2018.
El término multinube se refiere a cualquier ambiente en el que se implementan aplicaciones a través de dos o más servicios de nube pública, sin importar qué otros modelos de implementación puedan estar también en la infraestructura.
Tenemos una literal estampida de las organizaciones trasladando sus datos y aplicaciones a la nube y los clientes potenciados por la penetración de la Internet y el acceso a tecnologías móviles; están adoptando la nube más rápido que nunca.
Según un estudio reciente de Gartner, “el 70 % de las empresas elegirá una estrategia de varias nubes hacia 2019, a diferencia del 10 % actual”. Tanto organizaciones, como clientes son cada vez más reacios a la idea de limitarse a una única solución de software heredada que pueda no ajustarse a sus necesidades en el tiempo.
Sumado; los cambios y las migraciones son hoy dia relativamente sencillos gracias a las API similares y con estándares abiertos.
Mientras el nivel estratégico esté evaluando el diseño y dirección de centros de datos, el Departamento o Dirección de IT está evaluando entornos de hospedaje sobre la base del riesgo, la complejidad, la velocidad y el costo: todos factores que aumentan la dificultad a la hora de encontrar una única solución para todas las necesidades de la organización misma. Se infiere la importancia que han venido cobrando los Directores o Gerentes de IT y la hiperconvergencia de datos.
Este panorama ha motivado la evaluación e implementación de entornos de varias nubes que proporcionen un mayor rendimiento y una mayor compatibilidad entre plataformas, infraestructuras y aplicaciones; sin menosprecio de una redundancia, alta disponibilidad, tolerancia a fallos y acceso geopocicionado a los datos. También ha estado motivado porqué los contratos bajo esta modalidad permiten trasladar el menor costo posible a la entrega de soluciones a clientes y socios estratégicos.
Para entrarle a esta tendencia es necesario conocer las ventajas y las desventajas de adoptar entornos multinube. Por ejemplo; aunque se gana en flexibilidad, el uso de varias nubes aumenta los gastos generales debido a la división de la carga de trabajo de la organización entre distintos proveedores de servicio. Eleva la complejidad operativa obligando al equipo de desarrolladores de la organización a conocer distintas plataformas e implementar procesos de gobernanza adicionales, según los diferentes entornos que se deban admitir y gestionar. Adicionalmente una estrategia de multinube podría reducir el potencial adquisitivo de la organización, al reducir el volumen de descuentos, creando un modelo en que la organización comprará menos, a un mayor precio.
Gartner señala que la adopción de la estrategia de varias nubes va en aumento, pero no revelan cuánto se adoptó de cada plataforma.
Lo que sí es visible es que, en la tendencia de usar varias nubes, las organizaciones satisfacen la mayor parte de sus necesidades con los servicios con un proveedor principal y el remanente con otros variados. Influyen también los marcos de control, ya que demandan que se implemente un segundo entorno de nube como sitio alterno o de respaldo y recuperación; en caso de que el principal sea impactado en alguna forma.
Sin duda la adopción multinube aumentará en 2018, para lo cual las organizaciones deberán evaluar su estrategia de medición del volumen de adopción de cada nube, el uso interno, las demandas de carga de trabajo y los costos de implementación, de continuidad y de gestión.